MANUEL TRILLO DE LEYVA

1975

148 viv. Grupo I aparcamientos y club Social Torregreco

Urb. La Motilla, Dos Hermanas, Sevilla.

Manuel Trillo de Leyva,
Francisco Barrionuevo

1975

148 viv. Grupo I aparcamientos y club Social Torregreco

Urb. La Motilla, Dos Hermanas, Sevilla.
Manuel Trillo de Leyva,
Francisco Barrionuevo

148 Viv. Grupo I aparcamientos y club Social Torregreco

Urbanización La Motilla, Dos Hermanas, Sevilla.

Manuel Trillo de Leyva, Francisco Barrionuevo

Las 148 viviendas en la urbanización de La Motilla responden a una situación similar a otros proyectos de la periferia de aquellos años con trazados de calles entre huertas y olivares. La edificación responde de nuevo a la idea de construir una manzana abierta que envuelven zonas ajardinadas. En el Plan Parcial de Alfonso Toro Buiza, 1967, se proponían dos tipos de ciudad: una parte seguía el modelo de “ciudad jardín” con viviendas unifamiliares exentas que se organizaban en base a una trama de calles sinuosas adaptadas a la topografía; y otra, que podríamos denominar de “ciudad abierta” sobre parcelas donde la edificación residencial colectiva se dispondría con libre elección de la tipología edificatoria a excepción de la torre, por la limitación de altura que imponía el Plan. En el proyecto se construirían las calles perimetrales con la tipología de manzana garantizando las intenciones programadas en el documento de planeamiento. Se crearon tres grandes espacios semi-abiertos. La manzana se resuelve con dos viviendas dúplex superpuestas. A la superior, se accede desde una galería en planta situada en la fachada exterior, porque se buscaba una mayor conexión con la calle, desde donde se podrían ver el tránsito de las personas accediendo o saliendo de sus viviendas. Se incorporaba al edificio elementos urbanos tradicionales de ciudad. En el primer espacio semi-abierto que se construyó, se mantuvieron algunos de los olivares que existían en la zona y se estudió el perfil natural del terreno para crear una infraestructura topográfica que diversificara movimientos entre naturaleza y viviendas. Al nivel de la calle, el vacío de la esquina resuelve otras cuestiones funcionales, como el acceso al garaje mediante rampas curvas que recuerdan la manera en que fue solucionado el acceso al garaje en el edificio de viviendas de Huerta del Rey, también en escasa superficie y aprovechando parcialmente la pendiente existente del terreno. Tanto en el proyecto de Santa Eufemia como en el de La Motilla se puede afirmar que la arquitectura es la base para la generación de nueva ciudad, más aún en territorios por colonizar, y que, la vivienda moderna, en sus variadas formas de agrupación, muestra una gran capacidad de adaptación a diferentes situaciones generando diversidad de espacios urbanos.

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